No hay palabras en el mundo para describir lo que siento, nadie tiene tanto autocontrol como yo al hablar contigo... Podría gritártelo, susurrártelo al oído, decirte que me gustas mucho y que si no hablo contigo me falta el aire.
Quiero olvidarte porque tengo un dolor aquí en el pecho que no soporto, pero por otra parte no quiero olvidar este sentimiento tan bonito, aunque me haga sufrir.
Miro a mi alrededor, veo tu mirada puesta y fija en mi, esa mirada que me confunde, que me da esperanzas de algo inexistente. Con tu mirada fija tus ojos oscuros dan a entender que estas en blanco, pensando en nada.
Trato de entender tus expresiones, me dan a entender que hay tensión entre nosotros? eso dicen.
Pero tu sientes algo por otra y yo siento que me tiro piedras a mi propio tejado por ayudarte con ella y ver como te alejas de mi corazón.
Quizas nada de lo que siento es real, quizás todo sea una mera ficción en mi mente, una historia interminable con un triste final, una obra dramática de la que no quiero ser la protagonista.
No sé si será una obra pero desde luego sí es dramática, y la única que está escribiendo el guión, eres tú. Si algo no te gusta, esfuérzate en cambiarlo, si crees que no compensa, tíralo y empieza hoja nueva.
ResponderEliminarSufrir innecesariamente es una pérdida de tiempo enorme. Quizá deberías decirlo y por lo menos quitarte ese peso...
Un abrazo.
No tengo fuerzas para hacerlo, acabaría con lo único bonito que tenemos, la amistad.
ResponderEliminarMe gustaría poder empezar una hoja nueva, cambiar el guión... pero creo que vale la pena quererle tanto.
Si realmente es una amistad, no se pierde.
ResponderEliminarQuien no arriesga no gana, gnomito de jardín mío.
Pero quien no arriesga no pierde...
ResponderEliminarNo soy capaz de decirselo...
Si lo intentas puedes perder. Si no lo intentas, ya estás perdido.
ResponderEliminarDe verdad que no puedo...
ResponderEliminar